En México, el concepto tradicional de familia, que suele incluir una madre y un padre, representa solo el 53.8% de los hogares, según datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Con el Censo de Población y Vivienda 2020, se reveló que hay aproximadamente 350 mil hogares conformados por parejas del mismo sexo. Sin embargo, a pesar de los avances legislativos en la aceptación de familias diversas, las familias lesbomaternales siguen enfrentando serias dificultades para su reconocimiento legal y social.
Yolanda y Paola, una pareja originaria de Guanajuato, comparten su experiencia como madres lesbianas en una entrevista con EL UNIVERSAL. Ambas han enfrentado desafíos significativos en su vida cotidiana debido a prejuicios y estigmas sociales que rodean su forma de ser y criar a su hijo.
Prejuicios en una sociedad heteronormativa
Las familias conformadas por dos mujeres enfrentan discriminación tanto por su orientación sexual como por la percepción de la sociedad. Un prejuicio común que mencionan Yolanda y Paola es la creencia de que su hijo adoptará la misma sexualidad que ellas o que su desarrollo se verá afectado por la ausencia de una figura paterna. “Hemos recibido comentarios de que no sea un niño suave y que se sepa defender”, menciona Yolanda, quien también cuenta que su hijo a menudo es llamado ‘niña’ debido a su cabello largo y su preferencia por el color rosa.
La pareja también enfrenta intentos de la sociedad por encasillarlas en roles de género. “Asumir que como Paola es más masculina, entonces ella es el hombre y como yo uso vestidos, soy la mujer en la relación”, explica Yolanda, evidenciando cómo las expectativas sociales intentan forzarlas a encajar en un modelo heteronormado.
El rol de la madre no gestante también es cuestionado, lo que complica su reconocimiento como figura materna. “La gente a menudo pregunta quién es la ‘mamá mamá’, asumiendo que solo la madre gestante es la verdadera madre”, apuntan.
Retos legales para dos mamás
Las trabas legales también son una realidad para las familias lesbomaternales. “Cuando nació nuestro hijo, no nos dejaron registrarlo. El juez que nos casó se negó a hacerlo a menos que alguien más se lo exigiera”, relata Yolanda. Además, enfrentan vacíos legales en documentos oficiales, como en el acta de nacimiento, donde no se les reconoce como madres.
Esta situación no es aislada, ya que mujeres en Jalisco han denunciado que el Registro Civil se niega a registrar a ambas como madres, a pesar de la jurisprudencia de la Suprema Corte que ordena el reconocimiento de familias diversas. La Red de Madres Lesbianas en México ha documentado casos en los que se retira la custodia a las mujeres, forzándolas a enfrentar procesos legales discriminatorios.
Desafíos en el ámbito de la salud
Yolanda también compartió una experiencia negativa en el IMSS, donde al solicitar una incapacidad por embarazo, se le exigió tomar un curso sobre métodos anticonceptivos, ignorando su situación como madre en una relación no heterosexual. “Me condicionaron a hacer el curso para obtener mi incapacidad”, comentó.
Activismo y visibilidad
Yolanda y Paola han decidido hacer activismo a través de su cuenta de TikTok “dobleamormaternal”, donde comparten su vida diaria y buscan desestigmatizar la maternidad lesbiana. “Esto ayuda a que la gente vea que sí es posible y a que pierdan el miedo o el estigma de que si soy lesbiana, entonces no puedo maternar”, afirman.
A través de su plataforma, buscan generar espacios seguros y visibilidad para todas las formas de maternidad, demostrando que las familias diversas también tienen un lugar en la sociedad.
Con información de El Universal.